El Castillo de Onda finaliza el Trofeu 15 d’Abril dando un paso adelante en cuanto a nivel de la mano de Joan Roca, corredor mejor clasificado del equipo, que firmaba un top-20 en una jornada marcada por la dureza del recorrido donde se ha rodado a una gran velocidad en todo momento
Tras culminar el GP Montemayor con mal sabor de boca el Castillo de Onda llegaba a la Canoja con un objetivo claro, recuperar las buenas sensaciones y continuar progresando para estar cada vez más cerca de los grandes favoritos. Con esta mentalidad saltó a la carretera el equipo castellonense, que buscó protagonismo en los primeros compases de la prueba sin fortuna, ya que no conseguía estar presente en la fuga del día en un tramo inicial marcado por el gran ritmo al que rodaba el pelotón, que no conseguía romperse. Tras 40 kilómetros de batalla se formaba la espada, que llegaría al primer puerto puntuable con una renta próxima al minuto. Los corredores del Castillo de Onda, conscientes de que aún restaba lo más duro, se resguardaban en el gran grupo y dejaban trabajar a otras formaciones para la neutralización.
La dureza del recorrido propiciaba que el pelotón se partiera en dos en una de las cotas, momento que aprovecharían varios corredores para saltar del grupo y conectar con cabeza de carrera formando una avanzadilla de 13 ciclistas. Joan Roca sufría para intentar no perder terreno cuando se producían los movimientos y se quedaba cerca de conseguir estar presente en el corte. Finalmente, el corredor del Castillo de Onda lograba cruzar la meta dentro del top-20 y dar un paso adelante respecto a la semana pasada.